Los envases sostenibles contribuyen a la reducción de residuos que contaminan el medio ambiente y a fortalecer la economía circular. Son aquellos que desde su fabricación son pensados de forma responsable; el diseño y el material utilizado deben ser eficientes y funcionales.
Además de tener un beneficio directo en el costo para la empresa y un impacto menor en el ambiente.
El enfoque correcto para la selección de materiales y el diseño de estrategias para una aproximación eficiente, correcta y realmente alineada con la economía circular. En ese sentido, las decisiones que tomen las marcas sobre sus materiales y empaques tendrán un impacto crítico en su diseño y ciclo de vida.
Lo cierto es que los consumidores cada vez son más conscientes del medio ambiente y también las empresas.
Recientemente se anunció desde Naciones Unidas que se trabaja en calcular el impacto de la huella plástica. Empieza a haber una necesidad por todos lados de complementar esta huella ambiental con una nueva categoría que sería la huella plástica.
Ante esto, es también una necesidad de los consumidores y los países de considerar este impacto, para lo cual es necesario cambiar los paradigmas y conocer nuevos aspectos de la economía circular. El reciclaje es apenas uno más de los elementos de la economía circular, pues su concepción va mucho más allá para incluir mediciones precisas de lo que se utiliza y genera en cada etapa del ciclo de vida de los productos.